Astronomía Compartir en redes sociales Conceptos relacionados con el Sol Movimiento Diurno de los Astros La salida y puesta de los astros es la manera en que percibimos la rotación de la Tierra todos aquellos que nos encontramos sobre su superficie. Vemos que todos los objetos celestes aparecen sobre el horizonte por la dirección Este y se ocultan por la dirección Oeste, mientras que nuestro planeta rota alrededor de un eje que pasa por sus polos con un período de 24hs en dirección Oeste-Este. Además de saber en qué instante sale y/o se pone el Sol, es necesario conocer la dirección en el horizonte en la que sucede el evento, representada por el azimut de salida y/o puesta, ángulo medido sobre el Horizonte, desde el Norte hacia el Este, hasta la vertical al astro, y varía de 0° a 360°. Después de su salida, cualquier astro va aumentando gradualmente su altura hasta alcanzar el valor máximo en el instante de cruzar el meridiano del lugar, conocido como tránsito o culminación superior. Dicho meridiano es la proyección en la esfera celeste del meridiano geográfico del observador, y su intersección con el Horizonte determina los puntos cardinales Norte y Sur. Para los habitantes del Hemisferio Sur, el tránsito de todos los objetos celestes es en la dirección Norte, para los del Hemisferio Norte es en la dirección Sur. Posteriormente, el astro va disminuyendo gradualmente su altura hasta su puesta. Salida, tránsito y puesta forman parte del movimiento diurno del astro. Crepúsculo Habitualmente notamos que el cielo está parcialmente iluminado antes de la salida del Sol y después de su puesta durante un cierto intervalo de tiempo. Este fenómeno es el crepúsculo, matutino y vespertino respectivamente, y se produce por la dispersión de los rayos solares en las altas capas de la atmósfera. La duración del crepúsculo depende de la latitud del lugar y de la época del año. Existen tres tipos de crepúsculo según el grado de iluminación del cielo producida por las distintas alturas del centro del disco solar debajo del horizonte. En la vida cotidiana utilizamos el crepúsculo civil -altura del centro del Sol entre 0° y 6º debajo del horizonte- donde dicha iluminación, en presencia de buenas condiciones meteorológicas, permite realizar actividades al aire libre sin requerir luz artificial. Los navegantes utilizan el crepúsculo náutico -altura del centro del Sol entre 6° y 12º debajo del horizonte- durante el mismo se dan las condiciones más favorables para las observaciones utilizando el sextante. Para realizar observaciones astronómicas es necesario conocer el comienzo y el fin del crepúsculo astronómico, - altura del centro del Sol entre 12° y 18º debajo del horizonte-. Antes de su comienzo y luego de su fin, el grado de iluminación producido por el Sol es menor que el producido por las estrellas, con las que éstas son observables en su totalidad, y en caso de no estar la Luna sobre el horizonte se dice que es noche cerrada. Movimiento Anual Aparente del Sol También se observa que, durante el año, varían los instantes de salida y puesta del Sol, así como sus azimutes respectivos. El Sol describe en la esfera celeste un movimiento aparente a lo largo del año sobre un círculo máximo llamado eclíptica, moviéndose hacia el Este aproximadamente 1° por día y proyectándose sobre las 12 constelaciones del Zodíaco. Esta es la manera en que percibimos la traslación de la Tierra alrededor del Sol desde la superficie de nuestro planeta. La posición del Sol sobre la eclíptica en cuatro posiciones fundamentales determina el inicio y fin de las cuatro estaciones del año: otoño, invierno, primavera y verano. La eclíptica está inclinada respecto al ecuador celeste en aproximadamente 23.5°, por lo que ambos círculos se cortan en dos puntos, denominados equinoccios (del latín "aequus", que significa "igual", y "nox", que se traduce como "noche"). Durante los equinoccios, el Sol se encuentra alineado con el ecuador terrestre (en el momento del tránsito, el Sol se encuentra en el cenit en localidades situadas sobre el Ecuador terrestre) y sus rayos caen perpendicularmente sobre el mismo, haciendo que la duración del día y la noche en todo el planeta sea prácticamente igual. El Sol se encuentra en el equinoccio de marzo o vernal, también conocido por los navegantes como Primer Punto de Aries, alrededor del 21 de marzo, y en el equinoccio de septiembre u otoñal, también conocido como Primer Punto de Libra, alrededor del 21 de septiembre. El equinoccio de marzo marca el inicio de la primavera en el hemisferio norte y del otoño en el hemisferio sur, mientras que el equinoccio de septiembre marca el inicio del otoño en el hemisferio norte y de la primavera en el hemisferio sur. Cuando el Sol alcanza su máxima distancia con respecto al ecuador celeste, 23.5°, tanto hacia el Norte como hacia el Sur, tenemos los solsticios (procede del latín y significa "sol quieto"), lo que provoca un aumento en la duración del día en una parte del planeta y una disminución en la otra. Durante el solsticio de junio, alrededor del 21 de junio, el Sol se encuentra en el cenit en el momento del tránsito en aquellas localidades situadas sobre el Trópico de Cáncer, marcando el inicio del verano en el hemisferio norte y del invierno en el hemisferio sur. Durante el solsticio de diciembre, alrededor del 21 de diciembre, el Sol se encuentra en el cenit en el momento del tránsito en aquellas localidades situadas sobre el Trópico de Capricornio, marcando el inicio del invierno en el hemisferio norte y del verano en el hemisferio sur.